Un buen acristalamiento representa el complemento perfecto a una carpintería de garantías. Ofrecemos nuestros productos acristalados o sin acristalar según las necesidades de nuestros clientes.
El acristalamiento en una ventana cumple una "función térmica", aislando nuestra vivienda o comercio del frío y del calor. El vidrio dificulta los intercambios térmicos entre los dos ambientes que delimita, es una barrera entre el exterior y el interior de nuestra vivienda.
Nuestras ventanas se acristalan según las normas UNE y según las Normas propias de Calidad de nuestros fabricantes de perfil. Concretamente para el PVC, se utilizan calzos de este mismo material y juntas de EPDM. Los junquillos presionan al vidrio en todo su perímetro, y son cortados a medida exacta en inglete o a testa. Posteriormente son aclipsados a los perfiles en toda su longitud. En función del espesor del vidrio (normalmente 24 mm), las juntas de acristalar y los junquillos se seleccionan según indican las tablas de acristalar.
Nuestras ventanas con doble acristalamiento garantizan un perfecto aislamiento, en cualquier clima y ante cualquier ambiente. Con secciones de vidrio de 4, 6, 8 y 10 mm, cualquier configuración es posible.
Esquema de funcionamiento de un doble acristalamiento bajo emisivo con filtro solar: en invierno, mayor retención del calor y en verano, menor recalentamiento de la vivienda.
El doble acristalamiento con Aislamiento Térmico Reforzado (ATR) está formado por dos vidrios, uno de los cuales esta revestido de una capa transparente de óxidos metálicos nobles.
Durante las estaciones más frías, esta capa retiene el calor de la calefacción en el interior de su vivienda y en los periodos más calurosos impide que el calor excesivo del sol entre en la vivienda, y todo ello con grandes aportes de luz natural. Esta composición de vidrio se presenta como un acristalamiento idóneo para habitaciones con grandes acristalamientos.